La fuerzas de seguridad paquistaníes que están luchando contra los milicianos talibanes en el valle del Swat han rescatado a once niños que habían sido captados y adoctrinados para convertirse en terroristas suicidas en el valle del Swat. En concreto, nueve de ellos fueron encontrados durante una redada contra los talibanes. *Foto: un niño desplazado del valle del Swat, en un aotbús de retorno a su casa. REUTERS.
El entrenamiento de Los talibanes “aquellos que buscan la verdad” mostraron a los niños películas sobre la opresión de los musulmanes en los territorios palestinos y en la región india de Cachemira y les proporcionaron instrucciones religiosas para convencerles de que irían al paraíso si asesinaban a enemigos del Islam.
No es nada nuevo, muchos de ellos se criaron en los campamentos de refugiados, exiliados debido a la larga guerra de Afganistán. Ahí surgieron y se adoctrinaron en septiembre de 1994 de las escuelas coránicas -madrasas- de Kandahar (Afganistán), Queta, Karachi y Lahore (Pakistán).
No es nada nuevo, muchos de ellos se criaron en los campamentos de refugiados, exiliados debido a la larga guerra de Afganistán. Ahí surgieron y se adoctrinaron en septiembre de 1994 de las escuelas coránicas -madrasas- de Kandahar (Afganistán), Queta, Karachi y Lahore (Pakistán).
Hoy resalto junto a esta terrible noticia de la manipulación de menores para entrenarlos a ser futuros terroristas-víctimas a otra dramática que acaba de suceder en nuestro país que es la lacra del terror de ETA. Dos guardias civiles acaban de ser asesinados: Carlos Enrique Sáenz de Tejada García y Diego Salva Lezaun.
A los talibanes nunca les ha importado que los vieran como a unos bárbaros, como a unos campesinos primitivos. Supongo que a los terroristas de ETA poco o nada les importará sus acciones cobardes al igual que bárbaras e ignominiosas. Sólo importa la violencia, el daño, la muerte, la propaganda.
Desde aquí rechazo la utilización de la violencia como método de imposición de ideas. Cómo único método de diálogo, sanguinario e inmoral. Reclamo la educación en una cultura de Paz.
Me quiero quedar con la mirada de ese niño rescatado de las fauces de la atrocidad talibán. Pero no puedo, pienso en el fanatismo, y la otra cultura, la del terror que siempre quieren imponer los intolerantes mediante sus malditos métodos.
Me quiero quedar con la mirada de ese niño rescatado de las fauces de la atrocidad talibán. Pero no puedo, pienso en el fanatismo, y la otra cultura, la del terror que siempre quieren imponer los intolerantes mediante sus malditos métodos.