2010: cooperantes, terroristas y el Patio Maravillas.

Roque Pascual, Alicia Gámez y Albert Vilalta de la ONG catalana Barcelona-Acciò Solidària.

Comienza un nuevo año con la sombra de los tres cooperantes españoles secuestrados el 29 de noviembre en Mauritania por una facción más importante de Al Qaeda en el Magreb Islámico.
Uno de ellos, Albert Vilalta, herido por bala en una pierna, no está siendo atendido por ningún médico porque los captores no confían. Los demás compañeros Roque Pascual y Alicia Gámez seguro que también están viviendo los momentos más duros de sus vidas, sólo espero y deseo que sean liberados pronto. Su único delito es llevar solidaridad y aportar ese grano de arena que tanta falta hace.

Comienza el 2010 con la eterna amenaza terrorista, de forma global e indiscriminada, prácticamente invisible y que ningún ejército del mundo puede acabar. Los gobiernos enmudecen y toman medidas en aeropuertos y elaboran listas negras de países, como EE.UU, donde ciudadanos de Nigeria, Yemen, Pakistán, Cuba, Irán, Sudán y Siria que vuelen hacia Estados Unidos pasarán por controles y sus equipajes de mano serán registrados bajo los nuevos procedimientos de seguridad que comenzaron el pasado 4 de enero. Países estigmatizados que se mete a todo el mundo en el mismo saco, humanos estandarizados según su nacionalidad, con la etiqueta de “sospechoso terrorista” aunque seas un niño de diez años.

También hay personas que son tratados cual si fueran también peligrosos terroristas: el que intenta mejorar el planeta, el ecologista e idealista. Juan López de Uralde y otros tres activistas de Greenpeace permanecerán en prisión al menos hasta el próximo 7 de enero.
Una medida exagerada, desproporcionada y vergonzosa que ha sucedido dentro del foro de Copenhague, donde se trataba el cambio climático, de los pueblos ricos y los pobres que tristemente son cada día más dependientes de éstos últimos. Una Cumbre que ha tenido resultados bochornosos que nos plantean seriamente si estas reuniones sirven para algo salvo para encarcelar activistas que pelean por un mundo respirable y verde.

Hoy han desalojado un emblemático centro social okupado que es el Patio Maravillas de Madrid. Dos años y medio de cultura alternativa, asequible, autogestionada, libre y efectiva. Una noticia triste para esta ciudad que asume la gestión lamentable de una paupérrima oferta cultural.
El Patio atendía a personas sin techo, inmigrantes, vecinos y jóvenes con problemas.
Incluso profesionales como Trabajadores Sociales municipales tomaban iniciativas como recomendar la Oficina de Derechos Sociales del centro social okupado. Con este cierre hemos muerto todos un poco. Se sigue criminalizando los movimientos sociales como en la época de la dictadura. No se fomentan las iniciativas de barrio, del pueblo, y los Servicios Sociales en España a la cola de Europa..., o en el culo, como mejor se mire.

Comienza un nuevo año y sigo viendo incoherencia en el mundo. Quizás con el tiempo se imponga la razón, se tomen en cuenta las consecuencias de decisiones cruciales para el planeta, y que la sociedad hable, la ciudadanía se imponga por fin y recupere su espacio que le ha sido arrebatado. Pero claro, es cuestión de todos nosotros, de nuestra implicación y participación.